Internet es cada vez más global y cada vez son más los usuarios que se animan a experimentar con su propia página personal. La gran mayoría de los usuarios que opta por crear una web, suele enfocarla en algo relacionado con su trabajo o que le permita atraer a más clientes.
En cuanto a los sectores de los blogs, suelen ser de lo más variopintos, desde hoteles o restaurantes pasando por pequeños comercios y hasta prostitutas (o escorts) como prefieren ser llamadas que utilizan las ventajas que internet les ofrece para diferenciarse de las otras miles de chicas que se anuncian en los portales clasificados eróticos específicos como mileroticos.
Tatiana, la acompañante femenina que se abrió paso en internet
Una de las mujeres que logró reinventarse así misma para contar con marca propia en la red fue Tatiana una prostituta de Alcobendas que pasó años ofreciendo servicios sexuales a cambio de la tarifa mínima.
Durante ese periodo, se preguntaba cómo era posible que otras chicas, compañeras de profesión cobrasen tres y cuatro veces más y tuvieran una larga lista de clientes esperando. Mientras que ella, con unas tarifas “low cost” arañase unos pocos clientes a la semana.
Tener una página web, clave en el mundo adulto
Así conoció a Jennifer, la chica que le enseñó todo lo que hoy sabe y cuyo primer consejo jamás olvidará. “Debes crearte una página web con wordpress”. Tatiana, jamás había oído hablar del gestor de contenidos más popular del mundo y tampoco se imaginaba lo mucho que podría ayudarle en su carrera como acompañante de lujo.
Durante varias tardes, Tatiana acudió hasta el pisito de Alcobendas de su nueva mejor amiga, en la que aprendió desde lo más básico hasta incluso a personalizar los temas, añadir plugins y poner fotos sugerentes tanto en su página estática como en cada uno de los artículos del blog.
Darle visibilidad al blog, fundamental para hacerlo crecer
Pero por muy bonito que fuera el blog, las visitas eran inexistentes y la escort de Alcobendas se preguntaba si tanto esfuerzo y tiempo invertido en la página hubieran merecido la pena. Entonces recibió su segundo consejo más importante: “Un blog no existe, si no lo ve nadie”. Así pues, a partir de ese momento, cada vez que Tatiana publicaba un anuncio en un portal de clasificados eróticos, no se olvidaba de adjuntar el link de su página web.
Gracias a esto y con el paso del tiempo se llenaría de cientos de potenciales clientes que no dudaban en llamarla, e incluso, logró aumentar sus tarifas tal y como ella lo deseaba.
Ocultar la identidad
Tras un tiempo en el que su modelo de negocio parecía ir “viento en popa”, Tatiana entendió la frase “murió de éxito” pues acabó experimentándola en sus propias carnes. Empezó a ser reconocida por la calle, a recibir extorsiones y a temer que la delgada línea que separaba su vida privada de su trabajo como acompañante femenina desapareciera por completo.
Fue entonces cuando supo que era el momento de aprender una tercera y valiosa lección. “Ocultar su identidad”. De esta manera, empezó a retocar cada una de las fotos que subía a su web para pixelar su cara, y dejar de publicarlas al natural. Además, optó por mudarse de barrio dejando atrás Alcobendas y aprovechando la globalidad de internet para ofrecer servicios sexuales por toda España.
La historia de Tatiana, lejos de ser un caso aislado, es la gran manifestación de cómo tener tu propia página en internet pueden marcar la diferencia entre ser uno más, y destacar por encima del resto.